lunes, 20 de junio de 2022

El nuevo gobernante

Tenemos un nuevo gobernante, Gustavo Petro ganó por un estrecho margen, como se había calculado que sería para cualquiera de los dos candidatos.

Se dice en algunos medios que Petro debe tener en cuenta en su mandato, que el país quedó polarizado y que por eso va a ser difícil su gestión, no parece acertada esta conclusión. Creo que la polarización acabó con el resultado de la votación y la aceptación, sin ningún problema, por parte del perdedor.

Entre Hernández y Petro habían coincidencias en sus programas, acabar la corrupción era la principal, ya que Hernández tenia pocas propuestas, las diferencias se centraban en el método de aplicación, que no tiene mayor relevancia si el resultado es positivo y se implementa sin abusos.

El país dejó claro que quiere un cambio en la forma de manejar el Estado, votó por ese cambio con un respaldo de Veintidós millones de sufragantes, con eso se está diciendo qué se espera del gobierno entrante, recuérdese que ambos candidatos tenían en su programa esa propuesta de cero corrupción, así que no hay polarización, todos quieren lo mismo.

Sólo falta esperar que Petro cumpla sus promesas de campaña, será difícil por las figuras que lo acompañan, políticos señalados, acostumbrados a las malas artes de gobierno y que no conocen una forma honesta de trabajar la política. Su Vice-presidenta Francia reiteró en una entrevista televisiva que esto se va a hacer.

A propósito de Francia Márquez, ¿Porqué en Colombia hay ciudadanos afrodescendientes, ciudadanos indígenas, ciudadanos blancos, incluso, ciudadanos homosexuales? ¿Porqué no hay solamente ciudadanos con iguales derechos y oportunidades?


miércoles, 15 de junio de 2022

Promesas electorales

 Estamos en vísperas de una nueva elección para la presidencia de Colombia, hemos visto una de las campañas más agresivas de este siglo, tal vez la peor: falsas noticias, tergiversaciones, calumnias, espionajes, violencia verbal, especialmente, poses tratando demostrar lo que el pueblo quiere ver de cada uno de ellos, así no sea realidad.

No hubo cambio en la forma de hacer política, pero si es cierto que los eternos dirigentes de ésta tendrán que luchar mucho, muchísimo, por seguir en la actualidad, por ganarse nuevamente el reconocimiento que merecidamente han perdido (por lo menos en estas elecciones), el pueblo quiere y eligió un cambio.

Algunos engranajes de la maquinaria que nos gobernaba se encuentran presentes en las campañas de los candidatos para la segunda vuelta, la mayoría en la de Petro, algunos en la de Hernández, no es garantía del cambio, pero esperamos que el ganador sepa mantener su promesa de hacerlo, que pueda cumplir con las que se hicieron en el camino a la presidencia, es decir, se deben incluir en su programa de gobierno que en realidad es un contrato verbal. En la legislación colombiana no están tipificadas como delito.

Los ciudadanos tenemos el derecho de reclamar que esas promesas lanzadas y destinadas a alcanzar la mayoría necesaria para ganar, sean cumplidas, las promesas populistas son una costumbre en nuestro medio, hoy están a la orden del día, un cargo de elección popular conseguido con engaños debe ser punible, la ley debe castigarlo y el pueblo debe exigirlo.




¿Ruptura Institucional?

 El presidente Gustavo Petro y el fiscal Francisco Barbosa no son amigos, ni en política y al parecer, tampoco en lo personal, esa relación ...